Recuerdo las fotografías perfectamente, las que publicaste aquí...me gustaron muchísimo... Pero no hay manera de ver el reportaje... Busco el enlace y nada... :(
Que mal andamos...como duele la realidad, me pongo en la piel de los habitantes del lugar y escucho el mar que ya no está...debe de ser un horror... Ya no me creo nada del ser humano...el futuro más que incierto ya no existe en ese lugar... Magnífico repor! Un abrazo.
Recuerdo las fotografías perfectamente, las que publicaste aquí...me gustaron muchísimo...
ResponderEliminarPero no hay manera de ver el reportaje...
Busco el enlace y nada...
:(
YA LO TENGO!
ResponderEliminarQue mal andamos...como duele la realidad, me pongo en la piel de los habitantes del lugar y escucho el mar que ya no está...debe de ser un horror...
ResponderEliminarYa no me creo nada del ser humano...el futuro más que incierto ya no existe en ese lugar...
Magnífico repor!
Un abrazo.
Espectacular tu blog. Felicidades
ResponderEliminarAbsolutamente impactante. La realidad a veces le deja a uno sin palabras y con el corazón roto.
ResponderEliminarUn abrazo
Enhorabuena por la publicación y claro, por las fotos, quién no se acuerda de ese barco varado en medio de la nada o de la casa en ninguna parte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un buen trabajo como la mayoría de las cosas que haces!
ResponderEliminarSaludos
Mis felicitaciones por la publicación y por esas impactantes fotos.
ResponderEliminarUn abrazo
Felicidades Mario. El reportaje tremendo. UN abrazo.
ResponderEliminarAgustín.
El Chueca también recuerda las fotografías que nos trajiste por aquí en su día. Tremenda historia. Mis felicitaciones por tu trabajo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me gusta tu blog , te añado a favoritos.
ResponderEliminarMi más sincera enhorabuena...un trabajo impecable!!!
ResponderEliminarUn abrazo!!! ;)